En los últimos años, el mercado del entretenimiento ha experimentado un cambio significativo con la aparición de plataformas de streaming de video. El streaming es la emisión de flujo basada en la nube de contenido digital, como videos y música, siendo una forma rápida y eficiente para consumir contenido, además de ser accesible a través de cualquier dispositivo conectado.
Gracias a la conveniencia del streaming y amplia disponibilidad, su uso se ha incrementado de manera exponencial. Esto es lo que ha ayudado a establecerlo como un elemento fundamental de negocios y de los creadores de contenido.
En particular, los modelos de OTT (over-the-top) y FAST (free ad-supported television) han revolucionado la forma en la cual los usuarios acceden y consumen entretenimiento en línea. Han ganado terreno en la industria, convirtiéndose en parte importante en la cotidianidad de muchos consumidores a nivel mundial.
Las plataformas OTT, como Netflix, Amazon Prime Video y Disney+, ofrecen una amplia variedad de contenido bajo demanda, desde películas hasta series, documentales y programas originales. Los usuarios pueden elegir lo que quieren ver y cuándo lo quieren ver; la experiencia es personalizada para cada usuario según su historial de visualización y preferencias.
Por otro lado, las plataformas FAST, como Pluto TV, Xumo, y El Financiero Bloomberg+, ofrecen una experiencia similar a la televisión tradicional, excepto que son completamente en línea y de forma gratuita, sin necesidad de costosos extras de servicios. Los usuarios pueden ver programas de televisión en vivo, noticias, deportes y otros contenidos.
A cambio, estas plataformas muestran anuncios publicitarios durante la transmisión, lo que las convierte en una alternativa económica para los consumidores que buscan contenido de calidad sin tener que realizar un pago significativo por servicio o suscripción.
Ambos modelos tienen ventajas y desventajas. Las plataformas OTT ofrecen una experiencia de usuario personalizada y una gran cantidad de contenido exclusivo, pero a menudo requieren una suscripción mensual y no están disponibles en todos los países. Las plataformas FAST son gratuitas y fáciles de usar, pero pueden tener una selección limitada de contenido y mostrar anuncios publicitarios, lo que para algunos usuarios puede ser visto como una interrupción.
Los servicios OTT han cambiado la forma en que se produce y distribuye el contenido, y han abierto nuevas oportunidades para los creadores de contenido y las empresas de producción. Mientras que las plataformas FAST están rápidamente atrayendo a nuevos públicos y ofreciendo opciones accesibles.
Estos modelos están cambiando el panorama del entretenimiento en línea, ofreciendo métodos alternativos de consumo de contenidos para audiencias en todo el mundo. A medida que evoluciona la tecnología y cambian las preferencias de la audiencia, estas tendencias seguirán siendo una fuerza disruptiva en la industria del entretenimiento y en la forma en que vemos los contenidos.
